Nuestro recorrido por Liubliana ha sido:
Puente de los dragones
Diseñado por Jurij Zaninović en estilo Art Nouveau y construido en 1901 para el 60 cumpleaños del emperador Austro-Húngaro Franz Josef I, estos cuatro dragones de bronce nos dieron la bienvenida a Liubliana.
Cuenta la leyenda que Jason y los argonautas, en su búsqueda del Vellocino de Oro, se perdieron en los ríos Šava y Ljubljanica donde lucharon contra el dragón y lo vencieron, continuando su camino hacia el Adriático. El dragón es el símbolo de Liubliana y está en su escudo.
Puente Mesarki
Siguiendo la orilla se llega en nada al puente Mesarki con sus muchos candados como símbolo de amor, que nos vamos encontrando en tantas partes del mundo.
Mercado de la plaza Vodnikov
Nada más pasar el puente te encuentras con la plaza Vodnikov con su mercado de frutas, verduras y vegetales de productos frescos locales.
Siguiendo por la orilla hacia los Tres Puentes hay otro mercado artesano y los viernes otro con puestos de comida internacional, donde degustamos unos buenos platos a un precio asequible; estaba muy animado y concurrido, pero con un poco de paciencia se encuentra sitio en las mesas que están entre dicho mercado y la parte trasera de la Catedral.
El Triple Puente
Está diseñado por Jože Plečnik, el del medio era para el tráfico y los dos de los lados en ángulo para los peatones.
Tal vez sea una de las imágenes más representativas de Liubliana, con la iglesia Franciscana de la Anunciación al fondo de estilo barroco. El altar es su atractivo, de Francesco Robba, un escultor veneciano que pasó parte de su vida en Liubliana.
Enfrente está la estatua de France Prešeren, poeta romántico, icono de Eslovenia.
Plaza Kongresni
Para seguir el paseo se puede cruzar por los Tres Puentes o seguir hasta el siguiente, llegar a la plaza Kongresni, a la Universidad y regresar por una fuente que está al lado del puente Cobblers.
Nada más pasarlo se da a la calle Mestni, donde hay comercios y el Ayuntamiento de estilo renacentista de 1719, dónde suele haber exposiciones.
En frente del Ayuntamiento está la Fuente de los Tres Ríos: Ljubljanica, Sava y Krika.
Catedral
La Catedral fue diseñada por Giulio Quaglio en 1706, el techo es un ejemplo de barroco ilusionista, sus pinturas representan santos y evangelistas subiendo al cielo.
Castillo
El Castillo data del siglo XI. En 1355 perteneció a Austria y ha sido también refugio y prisión. Hay un funicular para subir y bajar, pero se puede ir perfectamente andando. Hay una parte que se visita sin pagar, pero sí hay que hacerlo para acceder a las distintas estancias y a la torre.
Bordeándole se tienen vistas de Liubliana.
Metelkova
Después de bajar el castillo nos dirigimos andando hacia Metelkova. Es un antiguo cuartel que se ha convertido en un espacio alternativo, y habitado, donde las pinturas de sus paredes no nos dejaron indiferentes.
Muchas fueron las impresiones que tuvimos en este lugar, desde original y colorido hasta cutre.
Edificios Art Nouveau
Cerca de Metelkova hay un agradable café al lado de la iglesia que hace esquina con el parque Tabor. Llegamos a la calle Miklošičeva donde hay varios edificios de estilo Art Nouveau, finales del siglo XIX y principios del siglo XX, el cual está bien representado en Liubliana.
Parque Tivoli
Desde allí el Parque Tivoli está muy cerca. Es amplio y agradable, ideal para pasear, también invita a sentarse un rato. Esta enorme zona verde al lado del centro da un gran atractivo a la ciudad de Liubliana.
Nebotičnik
Otra vista estupenda de Liubliana es desde la terraza del skycraper Nebotičnik.
Recomendamos subir para contemplar la ciudad con las casas de tejados naranjas y rojos y el castillo al fondo, saboreando la tarta Prakmursk Gibanica para dar un final perfecto a un día en esta ciudad que tanto nos ha gustado y a la que decimos adiós volviendo, ya por la tarde, de nuevo por la orilla del río Ljubljanika con muy buen ambiente.
Ciudades cerca de Liubliana
Cerca de Liubliana hay otras ciudades pequeñas que merecen una visita por su casco antiguo y la tranquilidad que se encuentra en ellas. Las tres que a continuación relatamos están hacia el norte de Liubliana, no muy lejos de la capital.
Radovljica
En dirección del lago Bled está Radovljica. Es una ciudad con una calle, no muy larga, con casas típicas de su pasado medieval. En el siglo XV adquirió el título de ciudad.
Está situada en un alto. Hay un pequeño paseo con miradores hacia las montañas de la cordillera del Karavanke y los Alpes Julianos. Al final de la calle principal está la iglesia. Después de la cantidad de gente que encontramos en el lago Bled, aquí se respiraba tranquilidad.
Skofja Loka
Otra ciudad con un casco antiguo más grande que Radovljica es Skofja Loka, aunque su origen es anterior.
En 1274 tuvo el acta de ciudad. Estuvo rodeada de muralla. En el 1511 sufrió un terremoto que la destruyó; al haberse reconstruido se ve el trazado medieval bien conservado. Tiene dos calles principales, una de ellas peatonal que lleva hasta el castillo, de donde hay una buena vista.
Kranj
Kranj, muy cerca de nuestra casa de intercambio en Senčur, tiene un casco urbano mayor que las demás.
Nuestros anfitriones antes vivían en Kranj y nos contaron que era una ciudad industrial en tipos de la antigua Yugoslavia. Ahora es la ciudad más grande con muchos servicios para la zona.
Si el Parque Nacional de Triglav y los Alpes Julianos nos habían gustado, Liubliana y las ciudades cercanas a ella han seguido la misma línea. Eslovenía nos tiene ganados.